Universidad de Lima

Para obtener logros hace falta compromiso, creatividad, persistencia y una buena dosis de diversión. Sí, diversión. Disfrutar lo que se hace es fundamental para tener buenos resultados. Así lo demostró un grupo de estudiantes de la Carrera de Comunicación de la Universidad de Lima, que ganó el Concurso de Creatividad Radial Junior 2017. 

Este evento es organizado todos los años por el Comité de Radio, compuesto por empresas líderes en el mercado radial: Grupo Panamericana, Grupo RPP, CRP y Corporación Universal. Y los ganadores fueron Aaron Vivanco, Edson Valdivia, Karina Chávez, Sofía Bardales, Lucía Hernández y María Pía Baella. Ellos crearon un conjunto de spots publicitarios educativos para evitar la anemia infantil. 

¿Cómo se enteraron del concurso Creatividad Radial Junior 2017?

Aaron: El último ciclo del año pasado, durante el Taller de Radio, el profesor Carlos Rivadeneyra nos comentó de este concurso y nos dijo que otros alumnos suyos ya habían ganado anteriormente, así que decidimos participar.

¿Qué trabajo presentaron?

Edson: Unos spots radiales que son una simulación de un programa de radio. 

Aaron: Trabajamos bastante. Nos lo tomamos muy en serio. Al principio discutimos mucho sobre lo que debíamos hacer, teníamos diferentes ideas, pero finalmente llegamos a un consenso. 

Karina: Fue muy divertido todo el proceso y todos aportamos algo en un ambiente muy positivo.

¿Qué se escucha en el spot?

Edson: Se escucha a los niños hablar y aconsejar a los padres cómo preparar sus alimentos, con sangrecita o hígado, por ejemplo. Al final, una persona dice: “No esperes que ellos te lo pidan” y los niños dicen: “Métele un hierrazo a la anemia”.

Karina: El concepto se basa en que la radio está en varios lugares. Por eso en el spot se escucha la radio en el mercado y una niña que estaba escuchándola le pide a su papá que prepare algo con hierro. Otro niño le pide a su tía que le prepare un saltado de hígado. Todo es muy tierno en realidad, los niños lo hicieron muy bien. Y es gracioso, porque un niño normalmente te pediría hot dog o nuggets, pero los niños del spot piden cosas sanas. 

Sofía: Cuando los niños decían que les gustaba el hígado, lo decían como si fuera verdad… aunque tal vez no sea cierto [risas].

¿Quiénes los apoyaron en su trabajo?

Aaron: La Universidad nos apoyó en todo momento. Tuvimos las cabinas de radio a nuestra disposición y también recibimos asesoría. 

Karina: Nos ayudó mucho el profesor Rivadeneyra y la jefa de prácticas Johanna Montauban. Ella nos planteó que saliéramos de la caja, que pensáramos en algo diferente. También los niños nos ayudaron, eran muy sueltos y se portaban bien, les gustó la radio. Eran los primos de Sofía.

¿Qué tarea tuvo cada uno?

Edson: Yo fui locutor, María Pía también. Aaron estaba en los controles y en la edición, junto con la jefa de prácticas. Sofía en producción y Lucía en sonidos y efectos. La dirección nos la repartimos. A veces estaba a cargo de Karina, otras veces de Sofía, que tenía más confianza con los niños.

¿Qué les pareció el Taller de Radio?

Karina: Me encantó el taller. Una vez que salimos de parciales, cada semana hacíamos un programa, entretenido y educativo. Me gustaba bastante, porque todo lo hacíamos en seis horas. El profesor y la jefa de prácticas nos ayudaron mucho y la relación era horizontal entre nosotros. 

Aaron: Usualmente nos pedían que cambiáramos nuestras ocupaciones para los diferentes programas. Había director, productor, locutores, etcétera, así que todos pasamos por todos los cargos. Conforme transcurría el taller, veíamos quién funcionaba mejor en qué cargo. 

Sofía: A mí me gustó mucho el taller en general. Y también el proceso de ver qué niños actuarían. Pensamos en contratar a niños actores, pero vi a mis primos en el cumpleaños de mi abuelita y les pedí que leyeran el guion, se desenvolvieron muy bien y su mamá aceptó que lo hicieran.

Edson: Otra cosa que me gustó del taller fue el viaje que hicimos a Puno con un grupo de alumnos. Visitamos tres radios, las tres con un enfoque de comunicación para el desarrollo. Todos los ciclos el profesor realiza estos viajes, es muy interesante, se aprende muchísimo. En Puno, pudimos compartir con estudiantes de Comunicación Social de la Universidad Nacional del Altiplano, muy interesante.

¿Qué ventajas le ven a la radio como medio de comunicación?

Karina: La radio implica una comunicación inmediata y está en todos lados, esas son grandes ventajas. Pero como dice el profesor Rivadeneyra, debería tener más contenido educativo, útil y de interés para todos. No habría que darle demasiado espacio a los programas de mero entretenimiento, haría falta combinar objetivos y tipos de programas. Ese es un tema que siempre está presente en las clases.

Lucía: Y eso es posible, pero es importante que haya una buena química entre los locutores. Así el tema sea denso, si existe esa buena química y un buen contenido, con un enfoque lúdico inclusive, el programa puede ser igual de entretenido que otros.

Aaron: A pesar de los avances tecnológicos y de internet, la verdad es que esa no es la realidad de todos en nuestro país. Para muchos peruanos la radio es el único medio de comunicación y ahí radica su importancia. Por eso la radio necesita ofrecer contenidos de calidad, no aburridos, y que enganchen a la gente.

¿Qué les aconsejarían a los alumnos del Taller de Radio?

Karina: Que aprovechen las asesorías. Nosotros llevábamos a cada clase avances de ideas, nos rechazaban a veces, pero no importaba, nos quedábamos a pensar en más cosas y así trabajábamos. Lo importante es tomarse esto en serio.

Aaron: Los profesores te ayudan, tienes los equipos a tu disposición, no hay excusas para no trabajar. Pero antes de que se pongan a grabar cualquier cosa, deben tener una idea clara de qué hacer, un plan A y un plan B. Ir a una cabina sin nada es una pérdida de tiempo.