10 de Mayo de 2017

Ulima fue sede de seminario sobre comunicación de gobierno

Como parte de la Cátedra UNESCO de Comunicación y Cultura de Paz, a cargo de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Lima, el Grupo de Comunicación Política y Medios de la Asociación Latinoamericana de Investigadores en Comunicación (ALAIC), con el auspicio de la Fundación Konrad Adenauer, organizó el Seminario Internacional “De la Crisis del Estado a un Estado de Crisis Permanente: Retos de la Comunicación de Gobierno”, que se llevó a cabo entre el 2 y el 3 de mayo en el Auditorio Central. 

El evento presentó dos conferencias magistrales expuestas por dos expertos internacionales en la comunicación de gobierno y cuatro mesas de discusión compuestas por especialistas de toda Latinoamérica.

“Procuremos que este seminario refuerce la convicción de que las políticas de comunicación de gobierno adecuadas son fundamentales para la construcción democrática”, dijo el decano de la Facultad de Comunicación, Walter Neira, antes de dar paso a la conferencia de Matías Ponce, quien aseguró que “el proceso clásico de la comunicación es muy tedioso para un mundo rápido”. Así, explicó cómo los roles comunicacionales tradicionales de los medios, el gobierno y los ciudadanos se han ido difuminando o intercambiando. Según Ponce, el contexto contemporáneo requiere que los políticos piensen en términos de la telerrealidad y se adapten a las nuevas reglas de juego de la comunicación. Un ejemplo de esta mutación, señaló, se puede ver en plataformas como Twitter, que han convertido la cercanía entre los políticos y los ciudadanos, antes mediada por varios actores, en una relación casi directa.

La primera mesa de discusión, titulada “Prensa y cobertura de crisis. ¿Observador o actor?”, tuvo como panelistas a los académicos Adriana Amado (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, Argentina), Paulo Soares (Universidade de Brasília, Brasil), Mauricio Coitiño (Universidad de la República, Uruguay) y a Franklin Cornejo (Universidad Antonio Ruiz de Montoya, Perú). En ella se discutió, respectivamente, la falta de confianza en las instituciones por parte de la ciudadanía; la corrupción como espectáculo mediático en el caso de la Operación Lava Jato en Brasil; la diferencia en el tipo de cobertura que realizan los medios en casos como el de la regulación de la marihuana y el alcohol en Uruguay; y la peligrosa predominancia de la nota informativa como única forma de abordar las noticias en los medios latinoamericanos.

Interacción digital y gobierno

La segunda mesa, “Redes sociales, crisis y gobernabilidad”, abordó cómo las redes sociales virtuales se han instalado en la vida pública. Para ello, Daniel Barredo (Universidad del Rosario, Colombia) mostró el trabajo que viene realizando con Daniel de la Garza (Universidad Autónoma de Nuevo León, México) acerca de la participación política de los jóvenes en Ecuador y México, cuyos resultados arrojaron que, por ejemplo, una elevada participación convencional en política se relaciona con una elevada participación en línea. Por su parte, Iria Puyosa (ALAIC, Ecuador) analizó cómo en la campaña presidencial ecuatoriana la guerra informativa tuvo una especial concentración en Twitter, donde cada candidato buscaba generar trending topics mediante el uso de bots para hacer quedar mal a los adversarios. A continuación, Julio Benavides (Universidad Autónoma de Bucaramanga, Colombia) analizó las narrativas periodísticas en el proceso de paz en Colombia, enfatizando que son las narrativas las que van a plantear “qué recordar y qué olvidar”. Por último, Luis Olivera (PUCP, Perú) abordó las narrativas construidas alrededor de la Alianza del Pacífico, que consideró no solo un proyecto económico sino también político.

El politólogo e investigador argentino Mario Riorda fue quien estuvo encargado de abrir el segundo día del evento. El especialista señaló que en tiempos en que las interacciones por vías digitales tardan segundos, los gobiernos siguen priorizando su toma de decisiones de forma analógica. Así, comentó que, según lo que arroja su propia investigación, el 67 % de funciones digitales no están previstas y solo se responde el 10 % de las interacciones que ocurren por medios digitales, y cuando estas ocurren suelen no tener ningún tipo de trazabilidad, por lo que muchas de las respuestas terminan siendo solo una performance, sin ofrecer verdadera solución a los reclamos o consultas hechas por los ciudadanos. “La convergencia es una necesidad, ya no es una opción”, dijo, y agregó: “No hay gurúes. Solo más y más investigación aplicada”.

En la tercera mesa, “Narrativas y retóricas gubernamentales”, Eugénie Richard (Universidad Externado de Colombia) abordó también cómo la retórica sobre las negociaciones de paz en Colombia fue transformándose y acomodándose a los fines políticos de distintos candidatos a lo largo de 15 años. Fernando Cavalcante (Universidade Federal do Rio Grande do Norte, Brasil), por su parte, analizó cómo en el 2017 las celebraciones por el Carnaval de Río se mezclaron con las protestas contra la corrupción, una situación que no debería extrañar tanto, aseguró, dado que los cantos tradicionales del Carnaval suelen tener una marcada connotación política y social. Acto seguido, Omar Rincón (Universidad de los Andes, Colombia) expuso acerca de la combinación entre la política y el espectáculo, propia de una época en la que, consideró, “ha muerto la política del siglo XX”. Asimismo, Mathias Mäckelmann (Universidad de Lima) analizó el relato que los presidentes peruanos construyeron alrededor de ellos y sus contrincantes políticos en los últimos 20 años.

La cuarta y última mesa se tituló “Comunicación gubernamental, crisis y explosión social”. En ella, la boliviana Nataly Vargas (Universidad de Salamanca, España) narró cómo el gobierno de Evo Morales se dio cuenta de la importancia de la comunicación gubernamental y destinó buena parte del presupuesto estatal a generar una estructura de comunicación política nunca antes vista en el país vecino. Además, Roberto Gondo (Universidad Presbiteriana Mackenzie, Brasil) analizó la estrategia comunicacional de João Doria, quien en 2016 fue elegido alcalde de São Paulo, un cargo con alta visibilidad que podría catapultarlo a un futuro político todavía más grande. Por último, Iris Jave (Universidad de Lima) presentó la investigación que realizó junto a la docente e investigadora María Mendoza acerca de cómo se vincula el gobierno con los jóvenes a través de la comunicación, una dinámica que resulta disonante cuando la comunicación de gobierno se centra solo en la divulgación de servicios, mientras que las interacciones de los jóvenes suelen cuestionar a la autoridad, sin recibir una respuesta directa de esta ante sus reclamos.

Antes de cerrar el encuentro, los miembros de ALAIC se pronunciaron sobre la coyuntura política en Venezuela, a la que no pueden ser ajenos, afirmaron, más aún cuando están abordando temas relacionados con la ciudadanía y la comunicación de gobierno. “Nosotros condenamos la actual situación que profesores, investigadores y periodistas viven en Venezuela. Nuestros colegas enfrentan serios problemas para el ejercicio básico de sus derechos asociados a la expresión mediática, la participación y el acceso libre y plural a medios de comunicación y a diversidad de fuentes de información”, manifestaron en un comunicado que pidió, además, que “el gobierno, fuerzas políticas y organizaciones de la sociedad civil busquen una salida institucional que garantice los derechos civiles básicos a la ciudadanía venezolana”.