09 de Enero de 2017

Franquicias: una excelente oportunidad de negocio

La prosperidad de un pequeño negocio puede truncarse si es que no se implementan nuevas estrategias de crecimiento. Una de ellas, de probado éxito en los últimos años, es la creación de franquicias. Por ello, el Círculo de Estudios de Desarrollo y Sostenibilidad de Empresas Familiares (CEDSEF) de la Carrera de Administración, con el apoyo del Centro de Desarrollo Empresarial de la Cámara de Comercio de Lima, organizó la conferencia “Franquicias”, llevada a cabo el 26 de octubre en el Aula Magna B y dirigida a la comunidad universitaria y el público en general.

La charla, presentada por el docente Guillermo Miranda, contó con la participación de Alfredo Taboada, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Lima, quien presentó a Fabiola Delgado, consultora de la misma institución y socia de Franchise Master Group (FMG). Antes de darle paso a Delgado, de enorme experiencia en el sector, Taboada recordó que la mayoría de empresas peruanas son de origen familiar, y es justamente por eso que deben procurar separar la familia de la gestión, pues es común que fracasen al pasar del dueño original a la segunda generación al designar funciones importantes basándose solo en el parentesco. “Una vez que una empresa está sólida, entonces está lista para ser franquiciada”, añadió. Para entender un poco más de este modelo de negocio, Fabiola Delgado hizo una precisión fundamental: no se trata de licenciar una marca, sino de clonar una gestión exitosa. Es decir, lo más importante es el traslado del know how. Eso es lo que sostendrá la empresa en el largo plazo —los contratos suelen durar entre cinco y diez años— y que permite que el 95% de franquicias sobrevivan al quinto año de funcionamiento.

Otro beneficio importante es que el solo hecho de franquiciar un negocio ya implica una mejora en el marketing, pues al tener una cadena que se va expandiendo, la marca se expone mucho más ante el público potencial. Además, en cuanto a la publicidad, lo común es que todos los franquiciados paguen una cuota destinada a publicitar la marca en general, no a un solo local, lo que permite que todas las tiendas se vean favorecidas. Delgado explicó que aunque las franquicias se han extendido bastante en otros países —en Estados Unidos la mitad del negocio minorista está franquiciado—, en el Perú aún hay empresarios que tienen resistencia a operar bajo este tipo de negocio. Sin embargo, las estadísticas de rentabilidad son muy contundentes en cuanto a la efectividad del modelo. No obstante, aconsejó revisar cuidadosamente qué es lo que se está comprando. Por ejemplo, es importante verificar que los números que ofrece una franquicia correspondan al formato que se va a adquirir, dado que, por ejemplo, los costos y el flujo de clientes de una tienda propia no son los mismos que los de un puesto en un centro comercial. Si se tiene esto en cuenta, el éxito está casi asegurado, afirmó Delgado.