24 de Julio de 2019

Cargando las baterías para los Panamericanos

Renzo Saux practica taekwondo casi desde que tiene memoria. A los cuatro años, siguiendo los pasos de su hermano Bruno, comenzó a aprender los movimientos básicos de este arte marcial. Más adelante, al igual que él, empezó a coleccionar medallas de diversos campeonatos nacionales e internacionales. En estos días, este disciplinado y talentoso deportista, egresado de Arquitectura de la Universidad de Lima, se prepara intensamente para participar en los Juegos Panamericanos Lima 2019.

¿Qué recuerdas de cuando empezaste a practicar taekwondo, con tu hermano Bruno?
Era muy pequeño, tenía solo cuatro años y lo que más recuerdo es que entrenaba bastante con él y muchas veces en doble horario, porque cumplía mi horario en el grupo que me tocaba y después seguía con Bruno, que entrenaba con mayores.

¿Has practicado algún otro deporte?
También me dediqué al atletismo por un tiempo. Terminaba el colegio y entrenaba atletismo, en la noche hacía taekwondo. Pude destacar en atletismo, en mi colegio, pero llegó un momento en que me decidí por el taekwondo, en el 2008, más o menos.

¿Por qué tomaste esa decisión?
Porque veía a mi hermano en el equipo nacional, él viajaba a campeonatos representando al Perú y yo pensaba que tenía posibilidades de hacer lo mismo; me gustaba el taekwondo, y obtenía ahí mejores resultados que en el atletismo.

¿Por qué se retiró tu hermano?
Llegó a ser campeón mundial en el 2012 y se retiró el año pasado. Él estudió Economía en la Universidad de Lima y ahora se dedica al ejercicio de su profesión. Ha sido un gran deportista, su carrera en el taekwondo ha sido impecable y, para mí, ha sido muy gratificante haber entrenado con él. Bruno entró a la selección nacional en el 2006, yo en el 2009, y desde entonces entrenamos juntos. También con Marcela Castillo, otra egresada de la Universidad de Lima.

¿Cómo fue para ti dividirte entre los estudios y el deporte?
Fue muy fuerte, realmente agotador, pero también lo he disfrutado mucho. Durante toda mi carrera universitaria he llevado cuatro o cinco cursos para poder entrenar cuatro horas diarias, como mínimo. Siempre supe organizarme muy bien y me fue muy bien en los estudios, terminé en el tercer puesto de mi promoción.

A poco tiempo de los Panamericanos, ¿cómo te estás preparando y cómo va el estrés por esta competencia?
Estamos entrenando muy fuerte. Llevamos una dieta balanceada que nos da energía para el entrenamiento. Algunos días resultan frustrantes, porque no te sale algo y otros días son de mucha satisfacción, porque salen las cosas que necesitas. Pero, sobre todo, tratamos de disfrutar el procedimiento, siempre. La idea no es llenarnos de negatividad, sino llegar al objetivo disfrutando.

¿Cómo manejas la tensión y las expectativas ante la proximidad de los Panamericanos?
Siento una responsabilidad muy grande por representar al Perú. Todos en el equipo estamos muy emocionados y a la espera de la competencia. Mi familia y mis amigos quieren ir a apoyar a mi equipo. Eso es muy bonito de su parte y sería muy bueno para mí sentir su apoyo, sobre todo considerando el esfuerzo y los entrenamientos que tenemos con el equipo; realmente lo entregamos todo por sacar el equipo adelante, y el hecho de que esta competencia sea en el Perú es muy importante. Ya hemos tenido un campeonato mundial en el Perú y puedo decir que cuando compito en el extranjero me siento más liberado, acá se siente un poquito más de presión, porque nos ven personas que conocemos.

¿En qué vas a competir tú?
En equipo, voy a participar en free style mixto. Somos cinco personas: tres hombres y dos mujeres. Una de ellas es Marcela, de la Ulima. Tenemos que coordinar muy bien para que los movimientos sean idénticos en una parte. En otro momento, cada uno realiza su propia secuencia.

¿Qué viajes por motivo de competencia han sido los más significativos para ti?
He viajado bastante y considero que los viajes más significativos han sido a Corea, China, Las Vegas en Estados Unidos, y República Dominicana.

¿Qué ha sido lo más importante para ti en esos viajes?
Haber aprovechado esos viajes para prepararme más y haber conocido otras realidades; eso te abre la mente y te genera diferentes perspectivas sobre la vida. Desde el entrenamiento que he tenido con los coreanos o con los chinos hasta la experiencia de haberme organizado para el día a día en otro país, todo ha sido importante para mí. También me pareció fantástico conocer la arquitectura de otros países, eso ha sido sumamente ventajoso para mi formación como arquitecto.

Seguramente siempre te ves con los mismos competidores, ¿has logrado hacer amistad con ellos?
Sí, hace tiempo que me vengo encontrando con las mismas personas y nos hemos vuelto amigos. En esta modalidad hay un ambiente deportivo muy positivo, de mucha amistad.

¿Alguna vez has tenido una lesión importante?
He tenido algunas lesiones. Me he lesionado la muñeca y he seguido la terapia física del Instituto Peruano del Deporte, paralelamente a los entrenamientos. Felizmente, no estoy impedido de entrenar.

¿Cuáles son tus logros más importantes en taekwondo?
Desde el año 2009 vengo consiguiendo varios triunfos internacionales. Los más importantes hasta el momento han sido el campeonato panamericano en el 2010 y en el 2012, con mi hermano, en la categoría de equipo masculino. Individualmente he logrado el subcampeonato panamericano, en el 2012. El logro más reciente ha sido la medalla de plata en un campeonato en Santo Domingo, República Dominicana.

¿A qué taekwondista admiras?
Admiro a mi hermano y a Marcela Castillo. Ambos han trabajado muy duro por sus objetivos y los han logrado. También tengo varios referentes de países asiáticos.

¿Cuántas horas entrenas al día?
En la mañana, cuatro horas, y otras cuatro horas en la noche. Estoy en este ritmo desde agosto, he tenido que dejar mi trabajo y he postergado mi titulación por un tiempo. Yo terminé la carrera y me puse a trabajar, pero vi que necesitaba entrenar más, así que lo expliqué en la oficina, me comprendieron y ahora solo estoy entrenando.

¿Dónde trabajabas?
En un estudio de arquitectura llamado Vértice. Ahí siempre me apoyaron, me permitían salir un poco más temprano para entrenar.

¿Te gusta tu carrera?
Me encanta la arquitectura y la verdad es que no pensaba que me iba a gustar tanto.

¿Representabas a la Universidad de Lima en campeonatos?
Siempre. Participaba en cada campeonato universitario, pertenecía al equipo de taekwondo de la Universidad y todos los años lograba campeonar. Mi especialidad no es pelea, sino poomsae, en la modalidad free style, esto es una coreografía con acrobacias y saltos con giros.

¿Qué piensas de la Universidad de Lima?
Con la Universidad y mis profesores siempre voy a estar agradecido. Siempre me apoyaron y me dieron la oportunidad de dar exámenes en otras fechas, cuando necesitaba viajar a campeonatos. Me dieron facilidades para cumplir con todas mis obligaciones. Por mi parte, siempre he sido un alumno muy dedicado. No pensé salir en el tercer puesto de la promoción, pero fue una alegría muy grande enterarme de eso. Siempre disfruté mucho las clases y mis estudios.

¿Qué piensas hacer cuando terminen los Panamericanos?
Una vez que acabe, mi primera acción será tomar vacaciones. Después comenzaré mi proceso de titulación: haré la tesis, así que estaré bastante tiempo en la Universidad.