11 de Julio de 2016

Una plataforma de búsqueda de empleo solo para jóvenes

Broderjobs es una plataforma web de colocación laboral con un objetivo muy específico: vincular a profesionales muy jóvenes (con un máximo de dos años de egresados) con empresas que les ofrezcan no solo un puesto de trabajo, sino un clima laboral donde se sientan a gusto y una cultura organizacional compatible con sus ideales.

Sus creadores son Jorge Conde, ingeniero industrial por la Universidad de Lima, y sus dos socios, Alejandra Núñez, chilena, y Manuel Pérez, venezolano. Ellos se valen de un sistema de algoritmos que hace este match entre candidatos y empresas, además de otros recursos originales que Jorge comenta a continuación.

Esta no es una plataforma más de reclutamiento de personal. Cuéntanos algunas de sus características.
La gran diferencia es que nosotros usamos inteligencia artificial (algoritmos) para medir el perfil profesional, experiencia y personalidad de cada candidato para estimar su compatibilidad con la cultura organizacional de la empresa. También les presentamos la empresa por dentro, lo cual es muy útil para saber si realmente les gusta ese clima laboral.

¿De qué manera les muestran el ambiente laboral?
Todos los estudiantes pueden conocer cómo es la compañía por dentro, sin necesidad de ir a la empresa o de buscar un contacto que trabaje en las oficinas; lo pueden hacer a través de nuestro portal, donde les mostramos el ambiente con fotos y videos donde aparecen practicantes comentando su experiencia. Nosotros mismos producimos el video, somos el bróder que comunica y dice, a todo nivel, cómo es la compañía donde el joven podría trabajar.

¿Qué otro servicio ofrecen?
Otro servicio apunta a reducir la angustia de los postulantes, por esperar si los van a considerar o no para un puesto. En nuestra plataforma verán el estado de su contratación.

¿Cuál dirías que es el objetivo de Broderjobs?
Nuestro gran ideal es cambiar la lógica de contratación en Latinoamérica. Queremos ayudar a los recién egresados, y a estudiantes en busca de prácticas, a decidir con quién trabajar. La idea es que el poder de negociación laboral esté en ambas partes, no solo del lado de las empresas. Para eso les ofrecemos a los jóvenes información de cómo funciona la compañía e incidimos en cuatro factores que son de gran importancia para ellos: horario flexible, posibilidades de crecimiento profesional, salario y beneficios, y ambiente laboral.

¿Cuánto tiempo les tomó armar el proyecto?
La concepción y desarrollo de la idea nos ha tomado más de un año y está en funcionamiento desde hace un mes. Estamos trabajando con empresas como L’Oréal, el grupo Cosas, ONG Techo, Medialab, BASA, Facusa y otras compañías pequeñas. Ellos pagan por el uso de la tecnología y los servicios que ofrecemos.

¿Cómo conociste a tus socios en este proyecto?
Cuando estudiaba la Carrera de Ingeniería Industrial, me fui a hacer un voluntariado a Brasil. Paralelamente, conseguí un empleo en el Parque Tecnológico Sorocaba, de São Paulo. Conocí a mucha gente allá, el Perú estaba en crecimiento y cuando las personas se enteraban de que yo era peruano me comentaban que querían venir aquí a hacer negocios. En esa oportunidad conocí a Alejandra Núñez, psicóloga chilena, y a Manuel Pérez, ingeniero de software venezolano.

¿Y cómo así se juntaron, pese a vivir en diferentes países?
Al regresar de Brasil trabajé un corto tiempo en Easy Taxi, luego en Interbank, por un año, al cabo del cual llamé a Alejandra y a Manuel para juntarnos y hacer un negocio. Es un formato de trabajo remoto, cada uno en su país, cada quien maneja sus tiempos, es más dinámico y ese aporte cultural entre personas de distintos países y profesiones es bueno. 

¿Qué crees que distingue a los jóvenes profesionales de hoy?
Esta nueva generación tiene aspiraciones y necesidades laborales muy diferentes a la generación de sus padres. Antiguamente, ellos entraban a una compañía y trataban de prolongar su estancia el mayor tiempo posible. La nueva fuerza laboral rompe este esquema y pone a la par su vida personal y laboral, no se mantiene demasiado tiempo en una empresa, busca cambios, confía mucho en su talento.

¿Qué te gustaría lograr con este proyecto?
Si llegamos a darle a un joven profesional el trabajo de sus sueños, le cambiamos la vida, porque está en el lugar correcto y en el puesto indicado. Me encanta la idea de poder ayudar, incluso, a toda su familia, ver al joven feliz, todos hablando de él.

¿Qué recuerdos guardas de la Universidad de Lima?
Muchos, realmente. Pero hay uno fundamental: mi primera y única práctica fue en la Oficina de Emprendimiento. Esa experiencia me marcó y me abrió un camino que me fascina increíblemente, el de la innovación y el emprendimiento.

Jorge Conde trabaja su emprendimiento con tres colaboradores, estudiantes de la Universidad de Lima:

Lucía Chang, estudiante de Comunicación
Se ocupa del diseño y el manejo de redes. “Para mí es un reto, me gusta bastante. Realmente, me encanta esto de crear estrategias, definir una identidad”.

Raúl Monzón, estudiante de Marketing
Lleva a cabo contactos con empresas para dar a conocer la idea de Broderjobs. “Me entrevistó Alejandra desde Chile, vía Skype. Fue una experiencia nueva, me sentí más nervioso que en una entrevista presencial. Ya he concretado algunas reuniones y sé que de mi empuje depende que se logren más”.

Irene Lagos, estudiante de Negocios Internacionales
También realiza contactos con empresas para dar a conocer la propuesta. “Me emociona ser parte de algo que está empezando y que tiene mucho potencial. Es una oportunidad tener tanto poder de decisión, justamente porque todo está por hacer”.