15 de Agosto de 2017

Jaime Nieto y ‘El proyecto Laramie’

El proyecto Laramie, de Moisés Kaufman, es la obra de teatro que está de temporada en el Teatro Ulima. Cuenta la historia de Matthew Shepard, un joven estadounidense que en 1998 fue torturado debido a su orientación sexual, y que murió como consecuencia de ese cruel maltrato. El caso tuvo una repercusión mediática increíble y dio lugar a esta obra de teatro que se ha montado en distintos países y que, en el Perú, dirige Jaime Nieto.

Jaime es egresado de Comunicación de la Universidad de Lima, director de teatro y guionista de populares series de televisión, como De Vuelta al Barrio, Al Fondo Hay Sitio y Mil Oficios.

¿De qué trata El proyecto Laramie?
Es un debate en torno a crímenes de odio, al matrimonio civil, a la igualdad. Trata del brutal asesinato a un joven universitario, a quien dos jóvenes de su edad lo sacan de un bar, lo suben a una camioneta, lo golpean, lo llevan al desierto, lo masacran y lo dejan desfallecido y atado a un cerco. Otras personas lo rescatan y lo llevan en estado de coma a un hospital, pero Matthew muere a los tres días. Este hecho puso de pie a toda la opinión pública estadounidense y mundial, todos se conmovieron y se organizaron manifestaciones públicas de rechazo. Años después, el presidente Barack Obama dio la Ley Matthew Shepard contra Crímenes de Odio. Fue algo muy mediático, e incluso se escribió una obra de teatro, se realizó una película y también documentales. Fue todo un proceso para rescatar la memoria sobre el trágico e inhumano suceso.

Es una reposición, ¿verdad?
Sí, la pusimos por primera vez hace cuatro años, aproximadamente, en el ICPNA de Miraflores. Es una obra que leí hace tiempo y me gustó mucho. Yo suelo leer y ver mucho teatro en Lima, y cuando tengo oportunidad de viajar, también.

¿Y cómo se sienten tú y los actores al montarla por segunda vez?
Cuando la pusimos por primera vez la idea era hacer reflexionar al público peruano sobre este tema, que en realidad era más discutido en otros lugares y no tanto acá. Pero pasó el tiempo y en el Perú ya se está hablando de la unión civil, de crímenes de odio, tolerancia, etcétera. De pronto me di cuenta de que los diferentes argumentos que yo escuchaba en la televisión, por parte de congresistas y miembros de las distintas religiones, eran similares a los argumentos que había puesto en escena hacía años. Así que pensé en reponerla y encontré un buen eco en el Centro Cultural de la Universidad de Lima. 

Algo interesante de la obra es que expone los distintos puntos de vista. Escuchas al mormón, al hombre común, al pastor, a los activistas. Moisés Kaufman y su grupo de teatro decidieron escribirla inmediatamente después de conocer el hecho, así que se trasladaron para recoger testimonios y lo que resultó de ese proceso fue un teatro documental. El público ve a ocho actores en escena, que se transforman en casi 80 personajes… Es una experiencia muy rica, el público sale conmovido con el espectáculo.

Pasando a otro tema, además de Comunicación, estudiaste Cine en Cuba, ¿verdad?
Yo ingresé a Comunicación en 1987, y faltando poco para terminar la carrera me fui a la Escuela Internacional de Cine y TV, en San Antonio de los Baños, en Cuba. En esa época cursaba el séptimo u octavo ciclo y todos en la carrera hablaban de esta famosa escuela de cine. Un día, vi un aviso en el panel, en que se convocaba a un curso de cine. A mí me encantaba el cine, así que postulé. Me aceptaron y gané una beca completa que incluía el pago de todos los estudios, mantenimiento, alojamiento, alimentación, absolutamente todo, e incluso un estipendio mensual. Me fui encantado. Cuando volví al Perú, me puse a trabajar hasta reunir un poco de dinero y pagarme los estudios, terminé mi carrera y me gradué como bachiller en Audiovisuales en 1994.

Luego te has dedicado al teatro más que al cine...
Así es. De un momento a otro decidí que lo mío era contar historias y lo hice en el teatro. Escribí mi primera obra de teatro, Carne quemada, que se estrenó en 1995. En la Universidad yo ya hacía teatro con un grupo llamado Metrópolis Teatro de la Urbe, donde estaban también Wendy Ramos y varias personas que ahora se dedican al teatro y la actuación. Sin pensarlo, esa obra me abrió la puerta a la televisión.

¿Qué guion trabajas actualmente para la televisión?
Estoy escribiendo De Vuelta al Barrio. Anteriormente escribí en Al Fondo Hay Sitio; antes de eso en Así Es la Vida y antes en Mil Oficios. Mi carrera, en realidad, es de escritor. Pero trato de compartir este trabajo con el teatro, y en algún momento quisiera retomar el cine, es algo que ha quedado pendiente.

¿Qué ha significado para ti volver a la Universidad de Lima, ya no como alumno sino como director de teatro?
Para mí ha sido muy emocionante poner esta obra en el Centro Cultural de la Universidad de Lima, porque ha implicado regresar a mi Casa de Estudios después de muchos años. Yo hacía teatro en la Universidad y tengo los mejores recuerdos de mi época de estudiante. Muchos maestros me apoyaron en diferentes proyectos, entre ellos el actual rector, Óscar Quezada, que fue mi profesor de Semiótica. Sin duda, fue una época muy bonita para mí, porque la Universidad nos permitió hacer muchas cosas: teatro, periódicos y, sobre todo, nos dejaron ser y expresarnos. Creo que eso fue muy valioso.

En El proyecto Laramie actúan Ingrid Altamirano, Claudia Berninzon, Katia Salazar, Bruno Espejo, Iván Chávez, Lía Camilo, Gianni Chichizola y Roberto Ruiz. La obra estará en cartelera hasta el 25 de septiembre, de jueves a lunes a las 20.30 horas y los domingos a las 19.30 horas. Las entradas se pueden comprar a través de la web del Centro Cultural, en la boletería del Teatro Ulima (dos horas antes de la función) y en Teleticket de Wong y Metro.