13 de Mayo de 2019

Pasión por el balonmano

Desde los 11 años, Carlos Trelles se acostumbró a tener poco tiempo libre. Comenzó a entrenar balonmano por las tardes, solo por probar, y le encantó. Desde entonces ha representado a nuestro país, primero en los Juegos Sudamericanos Escolares y luego en la selección nacional. Su próximo reto: volver a ser capitán de su equipo, esta vez en los Juegos Panamericanos, a desarrollarse en Lima.

Él estudia Ingeniería Industrial en la Universidad de Lima y desde enero de este año se desempeña como practicante del área de Finanzas en Vitapro. No por eso ha dejado de entrenar. Pero no se estresa, la vida le ha enseñado a ser disciplinado, a dar lo mejor de sí y a hacer todo con pasión.

¿Competías en campeonatos de balonmano cuando estabas en el colegio?
Sí, participábamos en los Juegos Deportivos Escolares Nacionales y campeonamos en el 2010, eso nos dio la llave para participar en los Juegos Sudamericanos Escolares, que ese año se llevaron a cabo en Lima. Nos fue bien, todos se quedaron sorprendidos de cómo el Perú estaba surgiendo en este deporte. El grupo que nos tocó fue difícil: estaban Argentina y Uruguay. Ese año Argentina campeonó y nosotros perdimos contra ellos solo por un gol.

Tú fuiste de los que introdujeron este deporte en la Universidad de Lima. ¿Cómo fue eso?
Cuando entré a la Universidad no había un equipo de balonmano, así que junto con unos amigos que jugaban conmigo en la selección pedí autorización para formar el equipo y entrenar. Nos dieron las facilidades e hicimos la convocatoria para formar el equipo. Fuimos cuatro amigos: Johan Corpus, André Camborda, Kevin Hurtado y yo; juntos formamos el equipo y nos hicimos cargo del entrenamiento, porque los cuatro jugábamos en la selección nacional de balonmano. Da la casualidad que los cuatro estudiábamos Ingeniería Industrial y somos amigos desde antes.

¿Cómo llevaron a cabo la convocatoria?
Creamos una cuenta en Facebook que se llamaba Handball Ulima e invitamos a la gente a unirse. Tuvimos oportunidad de participar en un torneo interuniversitario que se hizo ese mismo año, en el 2015, y campeonamos. También ganamos en el 2016. Lo bueno fue, además, que llegamos a aportar dos jugadores de la Universidad a la selección nacional.

¿Qué días entrenas en la selección?
Entrenamos de lunes a viernes, de siete a diez de la noche. Nos estamos preparando para un campeonato que será dentro de dos semanas y también para los Juegos Panamericanos.

¿Cuál es el nivel de la selección peruana de balonmano?
Hemos mejorado muchísimo. Hace 4 o 5 años éramos un equipo de gente muy joven y no le ganábamos a nadie. Pero a partir del año pasado hemos vencido a selecciones con más experiencia que nosotros. Nos hemos esforzado mucho para eso. Todos seguimos siendo jóvenes en la selección, yo ahora tengo 22, y este deporte se juega como hasta los 32 años.

¿Qué posibilidades le ves a la selección de balonmano en los Panamericanos?
Tenemos un grupo que no es fácil, pero es accesible. Está Brasil, y no es nuestro fin ganarle, porque ese equipo tiene 60 años jugando y todos sus jugadores son profesionales, juegan en equipos de Europa, viven de eso. Pero, además, están Puerto Rico y México. Tenemos que estudiar al rival: en este deporte no solo se hace trabajo de campo, es necesario analizar al oponente, planear lo que vamos a hacer, cómo vamos a defender y atacar.

¿Qué implica ser capitán de la selección?
Fui capitán la última vez que tuvimos un campeonato y ahora estoy trabajando duro para volver a serlo en los Juegos Panamericanos, ese sería un honor. Ser capitán implica muchas cosas, sobre todo responsabilidad, esfuerzo y sacrificio. Tienes que ser el primero en llegar y el último en irte, preocuparte por los demás, saber cuándo llamar la atención, porque dejar mucha libertad no es bueno, pero tampoco hay que ser muy drástico, hay que saber conversar y comunicar.

¿La experiencia es muy importante también?
Sobre todo en los partidos. Durante el juego necesitas controlar los tiempos y el marcador. Pero, en general, es un trabajo de comunicación, respeto y confianza.

¿Cuál ha sido el lugar más exótico al que has viajado con la selección?
Groenlandia, definitivamente. Ahí se celebró el Campeonato Panamericano. Es un país territorialmente grande, pero sus ciudades son pequeñas y el campeonato fue una fiesta para los lugareños. Todas las tiendas llevaban carteles que decían “Bienvenidos” en cinco idiomas y había descuentos para los deportistas que habíamos llegado de otros países. Además, los niños nos pedían tomarse una foto con nosotros y nos pedían autógrafos, eso me sorprendió mucho porque no nos conocíamos, pero fue muy bonito.

Ahora trabajas, estudias y entrenas al mismo tiempo. Ya no debes tener tiempo libre.
No tengo tiempo para nada. Desde enero estoy en este ritmo y me he inscrito solo en cuatro cursos, ya no en seis. La mayoría de deportistas estudia y entrena, pero este es mi último año en la Universidad y ya me tocaba hacer prácticas, por eso estoy más ajustado de tiempo.

¿Qué te parece tu trabajo en Vitapro?
Está muy bien, estoy aprendiendo mucho. Desde que postulé, les expliqué que pertenezco a la selección nacional de balonmano y que entreno por las noches, así que me dieron las facilidades para entrenar y estudiar. Vitapro es una subsidiaria de Alicorp. Estoy como practicante de Finanzas. Todo lo que he hecho hasta ahora me ha gustado, me parece interesante, aunque nunca me imaginé trabajar en el rubro de finanzas.

¿Qué te parece la Carrera de Ingeniería Industrial?
Muy buena, de verdad, y dura en mi caso, porque la he combinado con el deporte. Siempre tengo que estudiar por adelantado, porque si tengo un viaje, necesito adelantar mis exámenes. Me pasó una vez que en tres días tuve que dar seis exámenes y en uno de esos días presenté tres pruebas. Si no me ordeno y no soy disciplinado, no podría estudiar y entrenar. La Universidad también me da facilidades para armar mi horario y para dar exámenes en otras fechas cuando se me cruzan con campeonatos.

¿Crees que el deporte te ha formado también como persona?
Por supuesto, me ha dado disciplina y me ha enseñado a trabajar en equipo, aquí uno solo no logra nada. También he desarrollado empatía, habilidades de comunicación y de liderazgo, por ser capitán.

¿Qué otras cosas te gustan aparte del deporte?
Me gusta leer, desde chico me ha gustado leer libros de ficción y novelas policiales. Mi autor favorito es Dan Brown. Leo en la noche, antes de dormir. Antes leía más, porque tenía más tiempo.

¿Tu familia es deportista?
Mi hermano juega en la selección de balonmano desde el año pasado. Él acaba de cumplir 20 años. Mi hermana menor, de 13 años, ha empezado a entrenar en el colegio y le ha gustado. Mi mamá jugaba vóley y quiso que ella probara ese deporte, pero ella ha preferido el balonmano.