05 of September of 2020

Periodismo en tiempos de pandemia

Paralelamente a la tradicional función fiscalizadora del periodismo, la pandemia de la COVID-19 nos muestra la importancia que tiene también su función de orientación a la ciudadanía, lo que se denomina el periodismo de soluciones. Sobre este tema diserta la periodista y docente de la Carrera de Comunicación de la Universidad de Lima, María Mendoza, para la serie de videos Qué futuro quieres construir. Sostiene la docente: 

“En estos días de pandemia, las personas están muy cansadas y muy preocupadas. También están a la búsqueda de soluciones para los problemas que viven, esperan una voz orientadora. En este contexto, la función del periodismo es gravitante”. 

En su opinión, la prensa está llamada a desempeñar un doble rol: informar de manera profesional, con base en fuentes de calidad, expertas, nuevas y calificadas, y, en segundo lugar, hacer docencia para y con los usuarios, a fin de buscar soluciones para su día a día. 

Hoy las personas buscan más información que nunca, pero ello no implica que esta información sea segura y útil. Más bien, hay una sobreproducción de noticias falsas y las personas no lo saben. Necesitan que se les entregue contenido de calidad y útil. 

Soluciones para el día a día

Por otro lado, según una encuesta de opinión de Ipsos, de julio del presente año, la pandemia ha sacado a flote cuatro problemas gravísimos: la corrupción, la deficiencia de los servicios públicos de salud, la delincuencia y el desempleo. 

Tomando en cuenta esto, con mayor razón, María Mendoza señala que el periodismo debe dar voz a sus usuarios y debe escucharlos, porque de lo contrario ellos buscarán otros sitios dónde expresarse. Y añade:

“El periodismo tiene que seguir investigando los temas duros, pero también debe abordar la cotidianeidad de las personas, recoger sus iniciativas, sus formas de afrontar la crisis, porque al verlas otros pueden encontrar una salida a sus problemas. Es lo que se llama el periodismo de soluciones”. 

Además, manifiesta la necesidad de incidir en que esa información llegue a los sectores desprotegidos. Y concluye:

“La prensa tiene que cambiar, renovarse e innovar, en provecho de los usuarios, a quienes se debe. De esta forma, el periodismo podría poner un granito de arena en la descomunal tarea de construir la comunidad nacional que soñamos ser”.