16 de Diciembre de 2016

Donaciones Ulima

La Universidad de Lima, como parte de sus labores de responsabilidad social, realiza donaciones a instituciones de escasos recursos de sus bienes que se encuentran en buen estado, pero en desuso. En lo que va de este año, ha donado un total de 3.870 artículos a diversas instituciones. La mayor parte de los artículos donados son sillas giratorias y fijas, carpetas, escritorios, sofás, bancos, archivadores, cortinas y equipos de cómputo. Y la mayor parte de los beneficiarios son instituciones educativas, sobre todo colegios.

“Muchas veces, la Universidad de Lima renueva sus equipos o sus muebles y decide donar los que ya no usa para que instituciones de escasos recursos económicos puedan aprovecharlos”, comenta Vanessa Vallejo, jefa de la Oficina de Control Patrimonial. Todos estos bienes se donan dos veces al año, luego de un proceso de comprobación y verificación de toda la información consignada por las instituciones que solicitan la donación. En primer lugar, el señor William Quispe, verifica, in situ, que realmente se requiere aquello que se ha solicitado y, más adelante, se certifica que los bienes lleguen a manos de quienes lo necesitan. “Nos aseguramos de que las donaciones tengan un buen destino, que las instituciones realmente necesiten aquello que están pidiendo y eso solo lo podemos hacer visitando el lugar. A veces se encuentras en zonas muy alejadas”, relata William Quispe. Luego de la visita se elabora una lista de lo que se puede donar, que es revisada por el Consejo Directivo de la Universidad. Con su aprobación, el señor Wilfredo Huamaní, asistente de la mencionada oficina, se comunica telefónicamente con representantes de cada institución para informarles que la donación ha sido aprobada.

“Reciben la noticia con mucha alegría, porque tienen muchas necesidades y estas donaciones les ayudan a mejorar, a ofrecer un mejor servicio a la población que atienden. Es muy gratificante realizar estas llamadas, porque se transmite un mensaje positivo que genera mucha alegría para otras personas”, comenta el Wilfredo Huamaní. Tanto Vanessa, como William y Wilfredo recuerdan especialmente la donación que se llevó al colegio Pumacahua, en Chorrillos. Este centro educativo acababa de construir un anfiteatro y recibieron encantados las butacas, el proscenio, los equipos de iluminación y otros bienes que la Universidad entregó. En cuanto a los bienes que no están en buen estado, la Universidad entrega la donación a traperías que hacen reciclaje y, a su vez, ayudan a comedores infantiles y a poblaciones vulnerables, en general. Todas las donaciones se llevan a cabo de manera formal, mediante documentos escritos y siempre bajo procedimientos de rigor que son verificados por medio de una auditoría interna.