21 de Diciembre de 2017

Inventos de la Ulima fueron seleccionados en el Concurso Nacional de Patentes e Inventos

Del 24 al 27 de noviembre, en el Centro Comercial Plaza Norte, se realizó la exhibición de inventos finalistas del Concurso Nacional de Patentes e Inventos (Cnapi 2017), organizado por el Indecopi. Entre estos, estuvieron presentes cuatro proyectos de la Universidad de Lima.

El primer invento, el dispositivo de sujeción desplazable para cilindros, a cargo de los profesores Fabricio Paredes y Eduardo Cieza de León, es tan sencillo como práctico: se trata de un gancho que sostiene estructuras cilíndricas en máquinas de termoformado, permitiendo que estas sean acercadas o alejadas del termostato dependiendo de su resistencia. Cieza de León apuntó:

“Este dispositivo nace de la necesidad que teníamos de regular la distancia de las resistencias de un aparato de termo formado hacia el plástico que vamos a formar. Había un problema en cuanto a calcular el tiempo que debemos exponer el plástico para que esté a una temperatura adecuada. Decidimos regular la posición de las resistencias, de tal modo que si el plástico es más delgado la resistencia va a ser más efectiva a una distancia que a otra”.

Otros dos de estos ingenios, creados por los docentes Juan Carlos Goñi y Fabricio Paredes, son accesorios que buscan facilitar la vida de quienes no puedan caminar de forma temporal o permanentemente. El acople para silla de ruedas es una estructura tubular que se ajusta fácilmente a esta y que sirve tanto como soporte para levantar la silla por delante como para proteger los pies de la persona con discapacidad. Por su parte, el acoplamiento mecánico para vencer obstáculos está compuesto por tres pares de ruedas, para que quien transporte al paciente pueda ayudarlo a subir o a bajar escaleras con mayor facilidad.

Finalmente, el biocompósito de goma de tara, desarrollado por la docente Silvia Ponce y los alumnos Daniel Reynoso, Medalit Cevallos y Ross Contreras, permite remover el arsénico de las aguas contaminadas por la actividad minera, gracias a nanopartículas de magnetita que atraen a este elemento tóxico. Ross Contreras dijo:

“El arsénico causa enfermedades, como erupciones cutáneas y problemas en la salud y el desarrollo de los niños. Estos problemas llegan a las poblaciones por los afluentes mineros. Este biocompósito es la solución y como está hecho de goma de tara, una planta endémica del Perú, a la vez da trabajo a más peruanos”.

Estos proyectos de la Ulima fueron seleccionados como finalistas de Cnapi 2017, para lo cual tuvieron que superar exámenes muy exhaustivos de patentabilidad que demostraron su ingenio e idoneidad.