10 of July of 2020

“Debemos aprender a consumir lo peruano”

Terminó la cuarentena en Lima y es hora de reactivar la economía. Martín Reaño Vera, docente de la Carrera de Ingeniería Industrial de la Universidad de Lima y gerente del Comité Textil y de Confecciones de la Sociedad Nacional de Industrias, explica que uno de los principales sectores que se deben impulsar es el textil. Advierte que, en condiciones normales, la confección emplea alrededor de cuatrocientos mil trabajadores directos y novecientos mil indirectos. Comprar prendas peruanas es apoyar a las familias y favorecer la reactivación económica.

El Gobierno acaba de dar por finalizada la cuarentena. ¿Cuál es su diagnóstico con respecto a la industria textil?
Realmente, está bastante golpeada, porque ya venía de una situación un poco difícil. Fue como llover sobre mojado: prácticamente el cien por ciento de los negocios textiles se tuvieron que cerrar; se ha perdido la campaña de verano en Estados Unidos, que es nuestro principal mercado, porque la pandemia ha afectado a todo el mundo y Estados Unidos no ha sido la excepción; algunas cadenas de grandes tiendas globales han quebrado, otras están reinventándose y se han tenido que cancelar muchos pedidos. Por otro lado, grandes marcas mundiales se abastecían en forma regular del Asia, específicamente de Bangladesh y Camboya, y esos mercados se han visto afectados drásticamente. Incluso se han dejado de pagar obligaciones que estaban previstas, lo cual afecta también las compras que se hacían al Perú. Por otra parte, las compañías exportadoras, al venir la pandemia y la cuarentena, tenían mucha mercadería en proceso de producción; ya han pasado más de tres meses y recién han podido retomar sus labores, con la contingencia de que muchas han perdido pedidos y otras se han reducido. Esto, evidentemente, afecta toda la cadena.

Ahora que se están empezando a abrir las actividades en todo el mundo, ¿qué se espera de esta situación?
Todavía es un poco incierto cómo se reactivará el mundo. En España abrió el 40 % de los centros comerciales y la afluencia del público fue solo de 20 %, y vendieron poco. En Estados Unidos algunas cadenas comenzaron a abrir y tuvieron que cerrar nuevamente. En nuestro país, las empresas textiles y de confecciones han estado cerradas; sin embargo, la importación, si bien se ha reducido, ha seguido llegando. Han venido 45 millones de prendas de vestir durante la cuarentena, con precios que se han reducido en forma drástica, por una subvaluación y por remates de los proveedores asiáticos, que para deshacerse de sus prendas las han puesto al precio del mejor postor. También han ingresado 35 millones de metros de tejidos, que equivalen a la producción de 3 fábricas medianas en todo un año. Han entrado más de 15 millones de kilos de hilados, que equivalen a la producción de 4 fábricas medianas hilanderas en todo un año. Y sobre los 45 millones de prendas de vestir que han ingresado, se calcula que han dejado sin trabajo a entre 130.000 y 150.000 personas. Las mypes son las que se afectan más.

¿Cuántos trabajadores dependen de la industria textil?
En condiciones normales, la industria textil de confección emplea alrededor de 400.000 trabajadores directos. A estos se suman más de 900.000 trabajadores indirectos. La industria textil es muy importante en el país, porque es la principal generadora de puestos de trabajo en la manufactura. El 27 % de la población económicamente activa está empleada en la cadena textil de confección en el Perú, por eso es muy importante que el Estado aplique algunas medidas para regular la competencia interna.

¿Qué va a pasar ahora con las prendas que han traído las empresas importadoras, frente a la industria textil local?
Ahora que empiezan a abrir los establecimientos, los importadores ya están listos con todos sus productos para vender, para colocar hilados, tejidos y prendas, y la industria local no. La industria local nacional recién empieza a producir. Entonces se está restableciendo el mercado en total desigualdad de condiciones. Además, hay una fuerte inseguridad, porque el mercado peruano se ha reducido considerablemente, pues el consumidor está muy afectado, por obvias razones. Entonces, lo poco que va a haber de mercado va a ser primero explotado por los grandes importadores, que han seguido trabajando normalmente, y las industrias locales van a estar en una situación difícil.

¿Qué tipo de medidas debería dar el Gobierno para ayudar a la industria local?
Tiene que haber algunas soluciones para flexibilizar la contratación de mano de obra y recuperar empleos. Se necesitan medidas que impidan que sigan ingresando importaciones de forma masiva y textiles subvaluados, con declaraciones que no corresponden a lo pagado realmente en el exterior. Asimismo, se ha anunciado un programa intensivo de compras públicas de uniformes y prendas de vestir para las diferentes entidades del Estado. Eso también ayuda a reactivar. Pero algo que ayudaría mucho a todo el Perú es aplicar políticas como las del país más liberal del mundo, Estados Unidos. Ellos tienen el Buy American Act, una ley que privilegia las compras del Estado norteamericano a las empresas norteamericanas. Es urgente que eso se haga en el Perú, de forma que en las compras del Estado se privilegie la industria nacional. Que se importe únicamente lo que no se produzca o ya no pueda producirse en la industria local.

¿Los productores peruanos dependen de algún insumo extranjero?
Nosotros tenemos muchos insumos que se producen en el Perú: hilados, tejidos para confecciones, botones, avíos, etiquetas, entretelas, broches, todos los insumos que se requieren para una confección. También importamos materias primas de otros países que se transforman y a las que se confiere valor agregado. Estamos catalogados como una industria de confección que produce alto valor agregado, y tenemos un reconocimiento mundial por la calidad de nuestra confección. Con orgullo, podemos decir que el Perú abastece a las principales marcas del mundo. Entonces, nos deberían dar la posibilidad de abastecer también el consumo nacional, porque abastecemos al mundo. Y, claro, podemos traer los insumos que no se produzcan aquí para hacer hilados, porque el Perú es una economía abierta.

Ahora que viene el frío, no debemos perder de vista que somos productores de alpaca. Tenemos fábricas que producen telas de lana, de algodón, pesadas para el frío, y telas sintéticas como el polar, muy necesario ahora que empieza el invierno crudo. Todo eso debería ser comprado a industrias nacionales, porque así se reavivará la industria.

Las personas que están comprando ropa en este momento, en el mercado nacional, ¿cómo pueden saber dónde está el producto peruano?
Es muy importante apoyar la campaña que ha comenzado una empresa nacional: la campaña ADN Perú, que promociona el consumo nacional. Se ha iniciado como campaña textil, pero está abierta a todos los productores nacionales. Todas las empresas peruanas que tengan por lo menos ochenta por ciento de valor agregado nacional pueden usar el logo de ADN Perú de manera adicional a su marca. De esa manera se favorece el consumo de productos peruanos. Esa es la única forma de recuperarnos rápidamente de esta desgracia. Tenemos que ser muy creativos y ayudarnos entre peruanos para salir adelante. Los peruanos debemos aprender a consumir lo peruano. Antes de comprar un producto, es bueno ver la etiqueta. Todos los que tengan capacidad adquisitiva en este momento deben sumarse a la campaña ADN Perú, buscar el producto peruano.